“Una mujer debe tener dinero y una habitación propia si va a escribir ficción.”
Virginia Woolf (1882-1941) es una de las figuras más representativas de la novelística inglesa.
Tercera de cuatro hermanos, su padre era novelista y crítico literario y su madre miembro de una familia de importantes editores. Además de sus hermanos tenía tres hermanastros, hijos del primer matrimonio de su madre. Todo indica, y así lo reflejó de manera velada y autobiográfica en una de sus obras, que tuvo que soportar abusos sexuales de dos de ellos y que jamás pudo superar la desconfianza hacia los hombres, decantándose por una inclinación romántica por las mujeres.
Cuando Virginia tenía 13 años, su madre murió de forma repentina por fiebre reumática. Desde ese momento, comenzó a sufrir estados anímicos depresivos que se convirtieron en crónicos y que con frecuencia le hacían cambiar de ánimo, lo que hoy está diagnosticado como trastorno bipolar de la personalidad. Esta enfermedad se agravó con la muerte de su hermanastra Stella dos años después y por el fallecimiento posterior, en 1905, de su padre a causa de un cáncer.
El 28 de marzo de 1941 se puso el abrigo, llenó los bolsillos de piedras y se adentró en el río Ouse para acabar con su vida hasta que la corriente se la llevó. Antes de su trágica decisión dejó dos cartas, una para su hermana Vanessa Bell y otra para su marido Leonard Woolf, las dos personas más importantes de su vida.
Una habitación propia (1929) es un ensayo psicológico y social sobre la condición femenina y la enajenación de la mujer en la sociedad. El libro empieza planteándonos una pregunta: ¿Qué necesitan las mujeres para escribir buenas novelas? La respuesta la irá plasmando y argumentando a través de la exposición de situaciones diferentes. La conclusión final es que para que las mujeres escriban buenas novelas necesitan independencia económica y personal, es decir, una habitación propia.
“Un libro nunca se termina. Siempre está ahí, esperando que alguien lo haga nuevo, después de una nueva lectura.” Richard Bach